¿Cómo han evolucionado los influencers? ¿Cuál es su papel en la era digital? 5 ejemplos
La evolución de los influencers: su papel en la era digital
Los influencers han cambiado muchísimo en los últimos años. Lo que empezó con blogs personales y pequeños foros de nicho, hoy se ha convertido en una de las piezas más importantes del marketing digital. Ya no se trata solo de opinar o compartir contenido: ahora marcan tendencias, moldean la percepción que tenemos de una marca e influyen en lo que compramos.
En este artículo vamos a recorrer esa evolución, entender cuál es el papel real de los influencers en la era digital y conocer 5 ejemplos claros que muestran cómo han transformado la forma en que nos conectamos con marcas y contenidos en distintas plataformas.
¿Cómo han evolucionado los influencers?
Hace unos veinte años nadie hablaba de “influencers”. En aquel entonces eran simplemente bloggers apasionados que compartían sus opiniones en rincones muy concretos de internet. Todo empezó a cambiar con la llegada de YouTube y, poco después, Instagram, plataformas que abrieron la puerta a mostrar experiencias de una forma mucho más visual, cercana y aspiracional.
Hoy, con el boom de TikTok y el formato de video corto, la influencia ya no se mide solo en seguidores, sino en la capacidad de enganchar a la audiencia en cuestión de segundos.
Si miramos atrás, la evolución de los influencers puede resumirse en tres grandes etapas:
- Bloggers y foros (2000-2010): recomendaciones basadas en experiencias personales, donde la credibilidad lo era todo.
- Era visual (2010-2018): Instagram y YouTube catapultan a los influencers como referentes de estilo de vida y embajadores de marcas.
- Microinfluencers y autenticidad (2018 en adelante): auge de comunidades más pequeñas, pero mucho más fieles, con TikTok como referente en la creación de contenido.
El papel de los influencers en la era digital
Hoy en día los influencers hacen mucho más que promocionar productos: lo que realmente construyen es confianza. Ahora, son capaces de unir marcas con personas a través de historias genuinas y cercanas.
En la era digital, su papel se refleja en distintas funciones:
- Generadores de confianza: una recomendación de su parte suele tener más peso que cualquier anuncio tradicional.
- Creadores de tendencias: son quienes marcan qué se consume, qué música se escucha, qué se come y hasta qué temas entran en la conversación pública.
- Educadores y divulgadores: muchos dedican sus canales a enseñar sobre algún tema en específico
- Puentes emocionales: al contar historias en un tono cercano y real, logran que las marcas se sientan más humanas y alcanzables.
5 ejemplos de evolución de influencers
- Ibai Llanos:
De narrar partidas de videojuegos desde su cuarto pasó a organizar eventos con Messi o Piqué y entrevistar a estrellas internacionales. Ibai es la prueba de que un influencer puede convertirse en un referente cultural que va mucho más allá del gaming. - Juanpa Zurita:
De hacer vídeos cómicos en la aplicación Vine, a actuar en series de Netflix y producir proyectos de cine. Su evolución refleja cómo un influencer puede dar el salto a los medios tradicionales y triunfar también allí. - Microinfluencers de TikTok:
No necesitan millones de seguidores para impactar. Con comunidades pequeñas pero fieles, logran que la gente confíe en sus recomendaciones de skincare, deporte o cocina. Son el mejor ejemplo de que en la influencia digital lo más importante es la cercanía. - Yuya:
De grabar tutoriales de maquillaje en su habitación a crear una marca de cosméticos naturales reconocida en toda Latinoamérica. Su evolución muestra que un influencer puede pasar de compartir tips a construir un negocio con propósito. - Logan Paul:
De ser uno de los chicos más polémicos de Vine, a reinventarse en el boxeo y los negocios. Hoy, tiene su propia marca Prime, una bebida energética que compite con gigantes del mercado.
Consejos para entender la transformación del influencer marketing
- La autenticidad vale más que los números. Ya no importa tanto cuántos seguidores tenga alguien, sino si su comunidad realmente confía en lo que dice. La confianza no se mide en “likes”, se mide en la conexión real que logra con su audiencia.
- Piensa en el largo plazo. Una colaboración puntual puede funcionar, pero las que dejan huella son las que se construyen poco a poco. Cuando una marca y un influencer caminan juntos durante más tiempo, la relación se siente más auténtica y el mensaje gana fuerza.
- Dale espacio a la creatividad. Cada red social tiene su propio estilo: no se comunica igual en Instagram que en TikTok. Los influencers que triunfan son los que saben adaptarse y jugar con esos lenguajes para contar historias únicas.
- Combina lo grande con lo pequeño. Los macroinfluencers tienen alcance masivo, mientras que los microinfluencers logran confianza y cercanía. Si mezclas ambos en tu estrategia, llegas a más gente y con un impacto más real.
Conclusión: de creadores a constructores de confianza
Los influencers han recorrido un camino enorme: de escribir en blogs personales a convertirse en piezas clave del marketing digital. Ya no basta con mostrar un producto, ahora su verdadero poder está en crear experiencias, educar a sus comunidades y generar vínculos reales.
Las marcas que entienden esta evolución saben que trabajar con influencers no es solo cuestión de alcance, sino de construir relaciones auténticas que conecten de verdad con las personas.Y si lo que buscas es dar ese salto y aprovechar al máximo el potencial del influencer marketing, apoyarte en una agencia especializada como Impacktum puede marcar la diferencia. Con la estrategia adecuada, tus campañas no solo tendrán más impacto, también se sentirán más humanas y cercanas.